Bodies Bodies Bodies
Las comedias de terror son un género muy noble. Como ya dije incontables veces, comedia y terror van de la mano, a veces más explícitamente que otras, como en esta nueva película de A24 dirigida por Halina Reijn, Bodies Bodies Bodies.
Algunos la definieron como un slasher, pero creo que es más bien un whodunnit un poco sangriento y muy divertido. Sophie (Amandla Stenberg) y su flamante novia Bee (Maria Bakalova) van a pasar una noche en la que está anunciado un huracán a la mansión de su mejor amigo David (Pete Davidson). Me gusta como la película nos da de a bocados la información acerca de las relaciones entre los jóvenes que conocemos en la casa. Son en su mayoría de la generación Z, a excepción del novio de Alice (Lee Pace) a quien conoció por Tinder hace muy poquito.
De a poco nos damos cuenta que estos chicos no tienen las amistades más sanas del mundo, todos tienen algún recelo para con el otro y la tensión irá aumentando a medida que pasan las horas. Sophie propone jugar a “Bodies Bodies Bodies”, una especie de “Clue” de la vida real. Pero pronto las cosas toman otro color cuando uno de ellos aparece muerto de verdad y deberán descubrir quién del grupo fue el responsable.
Es una sátira a la generación Z. Términos como “gaslight” o “tóxico” son mencionados, y se hacen algunas acusaciones que si tenés una cuenta de twitter, seguro te resultan familiares.
Nos queda claro que este grupo de adolescentes es sumamente privilegiado y todo es utilizado a su favor por el guión para comentar sobre una generación que es muy consciente sobre cuestiones de clase, salud metal -astrología-, y problemáticas actuales pero que muchas veces esconden inseguridades detrás de sus morales salidas de un hilo de twitter. Me dio la impresión de que aunque la película los satiriza, no los odia, sino que los comprende.
La mayoría de las escenas suceden en una casa a oscuras solamente iluminada por linternas de iphones o collares fluorescentes de cotillón, que son aprovechados al máximo para lograr suspenso y una estética bastante única.
Todo el cast está muy bien, pero sin dudas destaco a Rachel Sennott que ya deslumbró en Shiva Baby y acá me hizo reír muchísimo en su rol de podcaster fan de la astrología.
Una película muy divertida con una mirada muy acertada sobre los jóvenes y un final bastante interesante. Esta disponible en prime video.