Alien Romulus
El uruguayo Fede Alvarez es quien dirige la nueva entrega de Alien, donde se vuelve a las raíces del terror y, como sabemos que le gusta a este director, hay mucho gore, sangre y cositas desagradables que aprecié un montón.
Durante la década pasada Ridley Scott retomó las riendas de Alien para darnos Prometheus y Covenant que aunque no fueron recibidas de la mejor manera en su momento, han ganado defensores con los años, entre los que me encuentro. A pesar de que se les criticó mucho la falta de acción, era claro que la búsqueda de Scott en ese caso era otra y pudo realizar su visión por completo, que es siempre algo bueno. Aunque lamentablemente no pudo finalizar su trilogía (de todas maneras me gusta bastante el final sombrío de Covenant con David). Más allá de que es Fede Alvarez quien escribe (junto con su habitual colaborador Rodo Sayagues) y dirige Alien Romulus, Scott estuvo bastante involucrado desde la producción.
Además de volver a las bases del terror y la acción, Romulus también toma la acertada decisión de volver a centrarse en personajes de clase trabajadora en lugar de empresarios y científicos ricos. En este caso, nuestra protagonista Rain (Cailee Spaeny cada vez me gusta más) y su androide hermano Andy (David Johnson es de lo mejor) viven en una colonia minera donde son básicamente esclavos, y desde su planeta ni siquiera pueden ver la luz del sol. Así que cuando se presenta la oportunidad de conseguir combustible y transporte de una nave aparentemente abandonada que convenientemente está flotando cerca que les permitirá escapar, obviamente la toman. Pero esta es una película de Alien, así que sabemos lo que les espera cuando aborden esta nave.
La película de 1979 hacía mucho a través del diseño, tanto del xenomorfo y los facehuggers que se volvieron automáticamente icónicos, como de la nave Nostromo, con sus pasillos, salas, laboratorios y armas. Alien Romulus también saca mucho provecho de eso, ya que esos sets dentro de la nave son logradísimos. Se siente todo muy tangible y sobre todo, vivido. Parece una nave abandonada y hasta tiene vibras de casa embrujada, con esos pasillos oscuros, infinitos y llenos de sorpresas terroríficas.
Y hablando de terror en los pasillos, esta película está llena de secuencias espectaculares plagadas de ideas. Desde la escena del laboratorio cuando despiertan los facehuggers y reclaman su primera víctima, hasta escenas donde nuestros personajes tienen que camuflar su temperatura o Rain tiene que esquivar el ácido de los xenomorfos mientras flotan en un espacio sin gravedad. Cada uno de estos momentos se sienten escritos por alguien que ama la saga y sabe cómo explotar este universo de forma creativa y efectiva.
Si no vieron la película, les aconsejaría que no lean más allá de esta oración (y que vayan a verla porque es muy buena). Después de la muy buena secuencia sin gravedad parecía que el peligro había terminado, pero para los últimos veinte minutos Fede Alvarez nos guardo una secuencia más llena de terror, body horror, gore y una criatura espeluznante cuyo diseño parece combinar el de los xenomorfos y el de los ingenieros de Prometheus. La criatura es espeluznante y me encantó.
Pero hablando de cosas espeluznantes, creo que esta película hace algo que me incomodó muchísimo ni bien lo vi y no me pude acostumbrar. Al contrario. Ian Holm, actor fallecido en 2020, vuelve en forma de CGI pero no como Ash, sino como otro sintético llamado Rook. Más allá de la cuestión moral de usar el rostro de un actor muerto para un personaje (o un robot en este caso) que se puede debatir, el problema es que se ve mal. Creo que el CGI no puede lograr un rostro humano sin que se vea extrañísimo e inerte. Nose si es algo del uncanny valley o simplemente no está bien logrado aquí, pero no me funcionó para nada. Me sacó de la película por completo y desearía que esa escena no estuviera.
Más allá de puntualmente eso, Alien Romulus usa muchos efectos prácticos y se nota. Los xenomorfos que se usaron son muñecos reales que se ven increíbles y están filmados como corresponde para apreciar su diseño tan icónico.
Me parece una gran adición a esta saga, me entretuvo y me asustó. No le puedo pedir más.
¿La vieron? ¿Qué les pareció?